La reina Isabel pasará por sus peores momentos en los siguientes episodios de la serie de La 1, que esta noche emite un nuevo capítulo a las 22.30. Debe despedirse de su hija Juana, que va a casarse con Felipe el Hermoso y además, su primogénita, renuncia a su matrimonio con Manuel de Portugal. Por si fuera poco, continúan las disputas por la conquista de Nápoles.
La primogénita de Isabel y Fernando es la elegida por Manuel, el nuevo rey de Portugal, para convertirse en reina del país vecino. No obstante, ella recalca su deseo de tomar los hábitos.
Muy diferente es el talante con el que Juana afronta su exilio, aunque la cercanía del viaje y las dudas sobre su vida de casada alertan a la reina. Al dolor por su partida se unirá el provocado por una desgracia familiar sin que pueda estar presente. A pesar de una fría acogida en Flandes, la infanta queda prendada de su esposo Felipe (Raúl Mérida) nada más conocerlo. Juana también simpatiza de inmediato con Margarita de Habsburgo (Úrsula Corberó), la prometida de su hermano Juan.
A su regreso, Cristóbal Colón se reúne con su hijo Diego. Sabe que el reencuentro con los soberanos no será fácil. Él se siente traicionado por Isabel pero es igualmente consciente de que habrá de rendir cuentas sobre las tropelías cometidas en las Indias.
Las continuas disputas por el trono de Nápoles se recrudecen al morir su soberano sin herederos. Fernando se postula ante Roma como rey de Nápoles. El Papa desea evitar que tanto el soberano de Francia como el de Aragón acumulen demasiado poder. Por ello, envía a César Borgia a la corte francesa mientras interviene en contra de los intereses de Fernando. En compensación, nombra Reyes Católicos a los monarcas de Castilla y Aragón.