Operación Triunfo ha vivido el primer rifirrafe de la edición. Del mismo modo que ocurrió en OT 2017, el fin del buen rollo ha llegado un mes después de que comenzara la convivencia en la Academia del programa. Este año, las afinidades también han provocado que se vayan intuyendo ya dos grupos principales entre los concursantes.
Noelia y Julia han sido las protagonistas de esta (de momento) leve riña después de que, aparentemente, la primera mandara a callar a la segunda echándole en cara que está todo el día cantando. "No te enfades por eso porque no es para enfadarse", le decía poco después Carlos a Julia intentando tranquilizarla. "Como a ti no te lo ha dicho 40 veces...", respondió la gaditana.
Carlos siguió asumiendo su papel de intermediario durante toda la mañana y habló también de lo ocurrido con Noelia. "Yo para estas cosas soy súper tajante, porque yo no le hablo borde a nadie", aseguró muy convencida la malagueña. "Ella me ha dicho que se lo has dicho cuarenta veces y yo le dije que todos decimos las cosas cuarenta veces. ¿Cuántas veces le he dicho yo a ella que no me meta los dedos en la boca cuando estoy bostezando?", recordó Right. "Estaría de mala leche, pero no son formas", le reconoció a su compañera.
El conflicto se extendió hasta mediodía, cuando Carlos preguntó a Noelia si seguía enfadada. "Yo no estoy enfadada, estoy mosqueada. Cuando me cabree, os esconderéis", le advertía. "Lo estoy con quien tengo que estarlo, obviamente. La gente tiene que aprender... cuando se me toca el coño, es lo que hay. Sorry", insistía la concursante mientras Famous, Carlos y Joan la instaban a tranquilizarse.
El enfado de Noelia se terminó de manifestar en el almuerzo. Un año más, la Academia vuelve a estar dividida en dos grupos en función de las distintas afinidades creadas entre los concursantes. Hasta ahora, Miki, Natalia, Alba, Joan, María, Famous, Marta, Marilia y Sabela han ocupado habitualmente una de las mesas del comedor. En la otra, el team 'vacilote' formado por Julia, Carlos, Noelia y Dave a los que se les une Damion, que bascula entre los dos grupos.
Este martes, tras la bronca, Noelia decidió cambiarse de mesa y María, que se dio cuenta de que la otra estaba prácticamente vacía, invitó a algunos a sentarse en ella. "Oye, que alguien se ponga ahí, o me pongo yo, que me sabe mal...", dijo la madrileña. "Si siempre ha estado vacía y no se ha muerto nadie...", saltaba enseguida Noelia trasladando la tensión al resto de sus compañeros.
Después de comer, los concursantes han puesto rumbo al plató de OT, donde como cada martes tienen los ensayos generales de la gala. Los espectadores del Canal 24 Horas han lamentado que Noelia y Julia tendrán la oportunidad de hablar de todo lo ocurrido, pero sin las cámaras del programa delante.
La primera impresión de Noelia: "borde" y "altiva"
"Ponerse delante del espejo puede dar un poquito de yuyu". Estas fueron las palabras con las que Andrea Vilallonga concluyó el pasado lunes su clase de Imagen y Comunicación después de que varios concursantes descubrieran qué pensaba el resto de ellos la primera vez que les vieron. Noelia se ofreció voluntaria y terminó 'arrepintiéndose' tras mostrarse en desacuerdo con lo que se decía de ella.
"Alocada", "insoportable", "altiva"; "echada para adelante", "borde por Whatsapp", "sobreactuada" fueron algunas de las cualidades que los demás dijeron que la malagueña transmitía en su primera impresión. "Desde luego, no soy así", se defendía Noelia, que explicó a su profesora lo que ocurrió con un grupo de Whtasapp que formaron los candidatos andaluces del casting antes de entrar en la Academia.
"Cuando vi un grupo de cincuenta y pico personas, en vez de poner 'Hola, ¿qué tal? Qué guay...', dije: '¿Qué hacéis? ¿Ya estáis con los nervios? ¡Falta un mes! Me voy de aquí que me estáis agobiando todos", explicó la que fuera primera favorita de la edición. "¿Y cómo lo dijiste?", le preguntó Vilallonga. "Borde, pero me la sopla...", respondió dándole la razón a sus compañeros.
"El cómo dices las cosas a los demás dice cómo tú eres, pero también qué respeto le tienes a ellos. Tienes una manera de comunicar muy quebrada. Tienes un punto duro", afirmó la experta en imagen y protocolo mientras que ella no parecía encajarlo de forma positiva. "¿Estoy exagerando? Es lo que se percibe de una primera impresión. ¿No me crees? Sólo tengo 12 años de experiencia, no pasa nada...", argumentaba Andrea.
"Tienes una cara y un cuerpo que transmiten amabilidad y simpatía y luego tienes una forma de hablar tan tajante, que sorprende más. Por eso te han puesto esto. Quiero que lo entiendas para que veas por qué te lo han puesto", decía a una molesta Noelia. Vilallonga la invitaba a analizarse durante la semana para que se diera cuenta: "Mira cómo reacciona la gente y cómo se toman lo que dices. Mira si te gusta o no te gusta y si lo quieres o no modificar. Pero no te enfades conmigo...", le pedía a su alumna que respondía con una tímida sonrisa.
