Yulia Demoss, la camarera rusa de First Dates, encontró el amor al final. Fue en el programa 500 cuando la joven se presentó como una comensal más del restaurante que pretendía encontrar a su "príncipe azul": "Busco a alguien para compartir mi vida, que sea mi compañero de viaje, para mí lo principal es que un hombre sea divertido y me haga reír, que lleve un estilo de vida saludable y que cuide su imagen". Sin embargo, no tuvo suerte y su cita pintó en bastos.
[El inesperado jarro de agua fría de Yulia]
Este jueves, el programa de Cuatro le tenía preparada una sorpresa, que venía desde Portugal -aunque es brasileño- y con ramo de flores incluido. Fue Carlos Sobera quien pidió a Yulia que, por orden de Yolanda, la directora, se pusiera en la barra con la excusa de que una cámara no funcionaba.
Al cabo de unos segundos, un joven irrumpió en la sala dejando boquiabierta a Yulia: "¿Qué es esto?". Se trataba de Erik, su nuevo novio. "¡Me he quedado en shock! Todo el mundo mirándome...Viene desde tan lejos. Es una sorpresa que en la vida me lo hubiera imaginado", decía.
"Nos conocimos hace unos meses en un barco y, desde entonces, tenemos algo especial y romántico", explicó ella después. Erik, un empresario de 31 años vive en Portugal. "Tenemos una relación a distancia porque yo vivo en Lisboa y ella en Madrid, pero si quieres no esta lejos"., confesó él.
Después de realizarse varias fotografías en el fotomatón para inmortalizar el momento, sus compañeros empezaron a vacilar a la pareja. "Los niños van a ser rubitos y con los ojos azules", decía Sobera. "Las distancias no existen", concluyó una enamorada Yulia.
