Ana Pastor presentó este domingo una entrega especial de El Objetivo en la que puso el foco en el machismo y el acoso a las mujeres. Y de entre todas las voces que pasaron por el programa destacó la de Leticia Dolera, a la que entrevistó la periodista después de que fuera una de las pocas actrices en dar un paso al frente ante este este problema dentro de la industria audiovisual en España.
La cineasta explicó los motivos por los que se atrevió a contar esto ahora: "Me he dado cuenta de que es importante cuando tienes un altavoz tener una responsabilidad de usarlo para bien", comenzó diciendo la catalana, que consideró que su caso era "una minucia" al lado de otros casos de violación que hay. Sin embargo, eso mismo fue lo que la convenció de dar un paso al frente.
"Ese es el problema, esa es al cultura de la violación: naturalizar cualquier tipo de violación. Aunque sea una violación pequeña, forma parte de un sistema que naturaliza que las mujeres seamos objetos de deseo y que los hombres tienen el derecho a tocarnos, jugar con nosotras, decirnos piropos", explicó.
Dolera contó entonces que cuando tenía 18 años, un director de cine le tocó una teta durante una fiesta de fin de rodaje celebrada en la sala Bikini de Barcelona. "Yo le dije: ¡Qué haces, tío! Y me respondió: 'Tocarte la teta'. Le dije que no podía hacer eso y me dijo: 'Sí, sí puedo'. Y lo volvió a hacer", relató la catalana, que añadió que aunque había mucha gente muy cerca, nadie hizo nada.
"Igual de grave es el tío que tiene el morro de hacer eso como el resto de personas que no hacen nada. Y eso es lo que llevamos durante siglos haciendo la sociedad. Mirar a otro lado y seguir permitiendo que las mujeres seamos algo secundario", argumentó.
Dolera explicó que se fue a casa sintiéndose mal, porque "ese es otro problema de la cultura de la violación": "Sentir nosotras la culpa y la vergüenza cuando la vergüenza es de quien agrede siempre", declaró la cineasta, que defendió los motivos por los que ha decidido no dar el nombre de este hombre que, "por justicia poética", no tiene un "especial poder en el ámbito audiovisual".
"Siendo yo se iba a producir una cosa morbosa, se iba a poner el foco en quién es él, ir a preguntarle... una especie de telenovela, sin centrarnos en el hecho de que el problema es la cultura de la violación que tenemos interiorizada", argumentó antes de contar otro caso.
La actriz explicó que en otro rodaje un actor le "tocó el culo con una tranquilidad y una pachorra...". "Y yo me quedé bloqueada. Esto fue en Francia y no dominaba el idioma y no me salían ni las palabras. Un compañero de sonido lo vio y me miró como diciendo: Bah, no pasa nada", aseguró.
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Ana Pastor García
Periodista
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