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Una mujer 'madridista' rompe esquemas y triunfa como comentarista deportiva en la televisión egipcia

  • La tertuliana repasa la actualidad del Real Madrid en el programa de TV 'Super'

Manar Sarhan se ha convertido en 'la mujer futbolera' de Egipto. Su participación en el programa de la televisión Super, ha supuesto un antes y una después en los medios de comunicación y en la sociedad del país en donde el fútbol "es cosa de hombres".

La comentarista compagina su pasión por el fútbol con su otra profesión, la de dentista. Su ilusión y amor por este deporte, así como su perseverancia le han servido para ser uno de los rostros más importantes de la famosa tertulia deportiva. Manar ha conseguido romper la barrera, y entrar en un espacio, hasta ahora, reservado a los hombres.

Tal y como señala El Mundo, Manar ha conseguido fusionar de manera perfecta sus dos profesiones: "Por las mañanas trabajo en una clínica del Gobierno y por las tardes me dedico al fútbol". Con este tipo de acciones,la protagonista de esta historia ha fulminado una gran cantidad de esquemas y estereotipos anclados en la sociedad de su país, y del mundo en general. Manar contaba así cómo su familia reaccionó ante su ingreso en el mundo de la televisión: "Al principio mi familia pensó: 'Dejémosla que ya se le pasará'. Pero aquí sigo".

A pesar de todo lo que ha conseguido, la tertuliana afirma que el camino para llegar al momento en el que está no ha sido nada fácil. "He recibido algunos comentarios como 'Vete a la cocina. Ése sí que es el lugar de las mujeres', pero yo no contesto a los insultos. Son mis seguidores en Twitter los que replican. Es cierto que soy la única mujer haciendo este papel, pero no estoy sola".

A sus 27 años, Manar, es la encargada de repasar en la televisión egipcia la actualidad del Real Madrid. De hecho, aprendió español por su cuenta para así poder seguir paso por paso todo lo sucedido a la liga española. Años antes de comenzar en el mundo de la comunicación, Manar intentó incorporarse a un equipo de fútbol, sin embargo, al no conseguirlo, no se dio por vencida y siguió luchando, encontrando en el periodismo deportivo su gran pasión.

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