Charlotte Caniggia se convirtió este jueves en la octava expulsada de la cuarta edición de Gran Hermano VIP. La modelo argentina supero en votos a Carlos Lozano, Laura Matamoros y Rappel, y abandonó la casa de Guadalix de la Sierra tras seis semanas de concurso.
Rappel y Laura Matamoros fueron los primeros nominados en conocer que estaban salvados, lo que dejó a la segunda con la boca abierta. Carlos y Charlotte tuvieron que esperar en la sala de expulsión para conocer el resultado de la audiencia. Ambos fueron protagonistas en la última semana de una de las polémicas de la edición con el caso del cepillo de dientes.
Charlotte fue finalmente expulsada y una vez en plató, la concursante habló de la gamberrada que organizó junto a su 'cuñi' Belén Roca, con la que se reencontró ayer tras su abandono.
Jordi González preguntó a la argentina por qué no le había dicho a Carlos Lozano que se había lavado los dientes con el cepillo que las concursantes restregaron por la taza del váter. "No podía decirle la verdad, se iba a volver loco", argumentó la expulsada que fue nominada de manera disciplinaria por la dirección del programa. Sin embargo, no se mostró muy arrepentida: "Pero Carlos está vivo, no se murió", respondió.