El exdirigente de Podemos, Juan Carlos Monedero, fue uno de los invitados principales del programa 'La Sexta Noche' de Atresmedia, en cuyo plató fue entrevistado por el periodista Iñaki López.
"Yo no he salido de Podemos, he salido de la dirección de Podemos, pero sigo firmemente comprometido con ellos y me siento ahora con mayor compromiso", comienza afirmando.
"Es un día hermosísimo. Habíamos perdido algo que creíamos que nunca volveríamos a encontrarlo, y hoy lo hemos encontrado. Es la recuperación de esa alma que nos fue arrebatada. Ha sido tan hermoso. Lo que hoy ha pasado me lleva a decir que todo lo vivido ha merecido la pena", explica.
"Creo que todo el mundo es consciente de que la responsabilidad del cambio la diene Podemos, como la fuerza política que ha actuado como catalizador y ha roto el bipartidismo. Eso nos carga de una responsabilidad extraordinaria", añade.
"La marca Podemos hay que mantenerla porque actúa como catalizador. Es muy importante que la gente vea unas papeletas que significan algo similar en todo el Estado. La ciudadanía pide esfuerzos extra, y Podemos debe hacer uno, sin perder su marca", comenta.
"No va a ser una sopa de siglas, ni la izquierda tradicional. Tenemos que discutir profundamente qué es la izquierda. Podemos tiene como tarea reinventar el lugar llamado izquierda", argumenta.
"En algunos lugares es muy difícil hacer más. El PSOE en Asturias tiene mucho que ver con algunos casos y fraudes. El del PSOE de Gijón decía que no pensaba dimitir ni siendo imputado y nos pone en una situación dificilísima", añade.
"No hay una batalla entre Íñigo Errejón y yo. Hablamos, porque lo que leemos que los medios dicen de nosotros no es lo que hemos dicho. De los medios hay que creerse lo justo. Él me planteó que nunca había dicho que fuera un lastre para las clases medias. Es verdad que había una diferente estrategia", expresa.
"Me fascina que los periodistas hayáis permitido que Aguirre se presenta con una sola hoja de programa mientras a Podemos nos decíais que dónde está el programa", apunta.
"Mi exigencia era dedicar más tiempo a estar con la gente. Los periodistas desde el 15M andan desnortados, porque quieren hacer preguntas que se ajusten a los patrones que había antes. Dicen que quién es el jefe o el portavoz del 15M, y ahí no había jefes. En Podemos tenemos un secretario general, pero constituyó unos estatutos por los que las bases del partido pueden destituirte, y ese es un rasgo radical de democracia que queremos para nuestro país", expone.
"Había unos ataques muy desproporcionados de algunos sectores que se han demostrado poco éticos. Lucía Figar presionó a la Universidad Complutense para abrir un expediente, y ahora está imputada en la red Púnica y ha tenido que dimitir. Y no vamos a hablar del despacho de Montoro, que ya saldrá", continúa.
"Hay dos maneras de pagar impuestos: declarar como IRPF o pagar impuesto de sociedades y luego pagarte dividendos. Ambas es idéntica cantidad y mi asesor fiascal siempre me dijo que estaba haciendo lo correcto, pero Montoro me amenaza públicamente y dice que va a por mí. Pero si hay un pleito, hasta que salga el juicio quedas como culpable. Por eso hice la complementaria. Y por cierto, Hacienda me va a tener que devolver muchísimo dinero, porque había pagado lo correcto y pagué más", relata.
"Fuimos muy ingenuos. Cuando asumes una posición pública te encuentras con todo tipo de ataques que intentan masacrarte, aunque sea por cosas que has hecho antes", prosigue.
"Yo sí me he enfadado mucho porque tardamos mucho en salir. Pero me acusaban y tenía que buscar papeles de hace 20 años y eso tiene sus dificultades. Yo no he sido ningún cargo de elección popular y he dado explicaciones como no las ha dado nadie. Queríamos dejar claro que la gente de Podemos hacemos las cosas de otra manera", comenta.
"Hemos perdido algo que teníamos muy claro cuando nos constituímos como partido. No queríamos ser un partido y lo fundamos, tuvimos que registrarlo, porque no había más remedio. Íbamos perdiendo ese alma que yo no quería perder", considera.
"El PP en Madrid se ha comportado como una organización para delinquir. Ciudadanos nace para regenerar la política y les apoya a ellos y al PSOE en Andalucía. Es un sinsentido. Al margen de Rivera es un aluvión de gente que no encontraba su acomodo en otros partidos", expone, asegurando que "no tienen sustancia política de ningún tipo". "Su programa económico es humo, pero humo muy bien envuelto", comenta.
"En Podemos hemos tenido un problema con nuestra organización, que es demasiado rehén de universitarios. No tiene sentido haberse reunido con barcos norteamericanos, con el FMI y no con los sindicatos", considera.
"Yo creo que no debiéramos ser rehenes de lo que está buscando Esperanza Aguirre, que antes de entrar los concejales se permitió el lujazo de volver a amenazar a Carmona. Creo que Twitter hace a la gente muy bocazas, lo vemos constantemente. Hay chistes muy desafortunados", expresa.
"Yo conozco a Guillermo Zapata, y si alguien dice que él es racista o antisemita se equivoca radicalmente, no lo es ni por asomo. No saquemos las cosas de quicio, porque en esa línea Nietzsche nunca habría podido ser concejal de Madrid. Que esos comentarios desafortunados impliquen que años después deba pagar un precio político por ello es sacar las cosas de quicio", concluye.
"Venezuela tiene problemas, eso es innegable. En el siglo XX han descubierto el petróleo y son un Estado muy separado de la ciudadanía. Son problemas que tienen que solventar, pero ya han solventado problemas de los que no nos damos cuenta. Ojalá el problema de todo el mundo que se está muriendo de hambre fuera no poder importar papel higiénico", explica, antes de finalizar que "hay similar libertad de prensa" en Venezuela que en España.