
La destitución de Cristina Puig como presentadora de El debate de La 1 en Cataluña ha abierto una nueva crisis en la cadena pública, que había justificado su relevo por "desobedecer instrucciones de sus superiores" en repetidas ocasiones.
"Me han despedido por motivos ideológicos. Voy a por todas, a defenderme", ha declarado Puig en El País. En este sentido explica que "solo ejercí mi derecho a discrepancia en determinados temas".
El Consejo de Informativos de TVE, que mostró su "preocupación" por el despido disciplinario de Puig, recordó que la periodista había trasladado en diciembre a sus superiores varias quejas por la falta de pluralidad en los invitados de El debate de La 1.
Por su parte, la dirección de la cadena argumentó, según el Consejo de Informativos, que Puig había puesto "continuas objeciones a las instrucciones recibidas, negativa a seguir las directrices relacionadas con el modo de efectuar ciertas grabaciones y desobedecer instrucciones de sus superiores".
El despido de Puig se produce semanas después del nombramiento de Eladio Jareño, exjefe de prensa de Alicia Sánchez-Camacho, como responsable de TVE Cataluña.
La periodista, que será sustituida por Oriol Nolis, llevaba trabajando en TVE desde 2009. Era trabajadora externa con un contrato indefinido.