Beatriz Montañez, expresentadora de El intermedio, volvió en marzo a la primera línea para contar su radical nueva de vida en su libro Niadela. Lo cierto es que la que fuera compañera de Wyoming entre 2006 y 2011 vive ahora en soledad en un casa en el monte con 150 euros al mes.
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"No tenía un camino claro por el que transitar y me veía con muchas dificultades para elegir entre todas las opciones que tenía. Me di cuenta que había mucho ruido en mi vida y eso me provocaba inestabilidad. Para saber qué es lo que tenía que elegir, tenía que parar y conocerme un poco más", explicó.
Per todo ha cambiado desde su reaparición. Montañez está viviendo un calvario por el acoso de personas que le sigue hasta su casa. "He tenido intrusos, no los llamo fans, los llamo intrusos, en los cuales ha tenido que intervenir la Guardia Civil, porque se han dedicado a revolotear por mi casa, a dejarme notas, a observarme con prismáticos al sentirme enclaustrada en mi propia libertad", ha dicho en el programa A vivir, de la SER.
"Ha sido muy frustrante sentirme vigilada en mi propia casa y por primera vez en cinco años, donde no he sentido miedo de la naturaleza, sí lo he sentido con las personas que me observaban y me vigilaban, y se convertían en intrusos dentro de mi propio hogar", ha añadido la presentadora pidiendo a quienes "tengan la intención o que estén buscando dónde está Niadela" que no lo hagan.
Beatriz Montañez: "Me he sentido vigilada"
Beatriz Montañez ha pedido que se respete su decisión de vivir fuera de la ciudad: "Creo que cuesta entender al otro en general. Es cada vez mucho más difícil ponernos en la situación del otro. Creo que ser capaces de entender al otro requiere una vez más, pararse, ponerse en la piel del otro, pensar como el otro piensa, salir de nosotros mismos y el hecho de salir de nosotros mismos simplemente por hacerlo".
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"Los ecos que me han llegado es que estoy loca, que seguramente esté enferma mental, que tenga una seria depresión", ha afirmado la presentadora, reconociendo también que "he sentido seguridad en lo que hago, en lo que digo y en las decisiones que tomo, porque las reflexiono y las recapacito y pienso en los pros y los contras".