Alonso Caparrós ha dejado helados este lunes a sus compañeros de Sálvame al realizar un desgarrador testimonio sobre los excesos que tuvo en el pasado durante unas fiestas similares a las de los futbolistas que él mismo organizaba.
"Aquí pasamos por sitios que son tremendos. Hablamos de los chicos y chicas de compañía de si van o si dejan de ir como si tuvieran la oportunidad de elegir. Hay mucha gente que no tiene esa capacidad", empezó destacando antes de abrirse ante las cámaras de Telecinco.
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"Una de la cosas que más me cuesta purgar es lo que yo le he podido hacer sentir a todas estas personas, en este caso mujeres, a lo que yo en esos tiempos horribles en los que mi adicción me ganaba le pude hacer sufrir. A cualquiera de esas chicas que han estado conmigo en esa situación, yo con mucha vergüenza les quiero pedir perdón desde lo más profundo de mi corazón. Yo ahora tengo una hija de 22 años y estoy en otra posición, no me lo puedo perdonar", aseguró con la voz quebrada.
Caparrós confesó que, a día de hoy, aún le vienen fotografías mentales en los momentos más bajos de ánimo: "Esa imagen de muchas caras, de muchos lugares oscuros, y de la huella que haya podido dejar en muchos seres humanos... He descubierto que es muy importante lo que un ser humano le puede aportar a otro. He visto en las caras de esas personas lo que estaban pasando y en ese momento parecían no tener importancia...", rememoró Alonso, que en ese momento rompió a llorar.
El desgarrador testimonio de Alonso Caparrós
"Gente con madre, con hijos que me contaban cosas que no sé si me voy a poder perdonar. Tengo dudas de poder perdonarme algún día. Son el infierno y yo he estado como demonio", ha confesado. "Cuento las cosas para que les sirvan a otros y poder encontrar la paz y el perdón. Han sido muchos año de hacer sufrir a los demás, familia, amigos y extraños... Que nadie se engañe, ni nadie lo naturalice, esconde abismos el mundo de la noche", ha querido concienciar.
Caparrós, que este fin de semana ha atizado con dureza a Rafa Mora en una entrevista, ha dicho que las cosas que llegó a hacer en esas fiestas "son inconfesables". "La gente se espantaba cuando me veía por lo que me había convertido", reconoció antes de dejar claro que nunca hizo nada ilegal por lo que ser denundiadciado. "En esos rostros había suplica, de entiéndeme, esto no...y no...", ha zanjado el tertuliano.
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