Hace 12 años arrancó La Sexta Noticias. Y aunque Cristina Saavedra no fue presentadora de los informativos desde sus inicios principio, sí fue uno de los miembros originales de la plantilla del canal.
Llegó a La Sexta procedente de Antena 3, donde había presentado durante seis años Ahora, un espacio de corazón en el que, tal y como ha confesado, no se sentía cómoda. "No lo echo de menos y no querría volver a hacerlo", afirma Saavedra en palabras a ECOTEUVE.ES.
Tras esta etapa rosa, la presentadora dio un giro a su carrera cuando recibió una llamada de uno de los pesos pesados de La Sexta: "Ferreras me dio la oportunidad de volver a los informativos y yo vi el cielo abierto, porque es donde siempre quise estar". Y añade que le estará "eternamente agradecida". "A mí me ha ayudado muchísimo personal y profesionalmente", afirma.
¿Qué balance hace de estos doce años de La Sexta Noticias?
Yo llegué más tarde a sentarme en el plató [originalmente su informativo lo presentaba Mamen Mendizábal], pero cuando arrancó La Sexta Noticias ya estaba ahí. La estructura estaba hecha, estaban las presentadoras, y me ficharon con la idea de buscar la noticia en la calle. Antonio García Ferreras me dijo que quería que yo estuviera allí donde ocurriera algo gordo. Y así empezó todo. Luego estuve viajando haciendo varios documentales en México, Etiopía y Los Ángeles.
Uno que hice con Pau Gasol, que era mi amigo desde hacía tiempo, fue uno de los momentos más mágicos que he vivido en La Sexta. Tuve la oportunidad de mezclar mis dos patas vocacionales: el periodismo y la cooperación. Luego llegaron las sustituciones y fue Antonio el que decidió sentarme en el plató. Fue una etapa muy loca, muy divertida, pero de muchísimo aprendizaje. Cuando comenzó Más vale tarde me quedé en el informativo de las 20.00 donde soy muy feliz.
¿El informativo de la noche tiene una responsabilidad extra?
Creo que la responsabilidad es la misma. A todos los informativos le ponemos la misma carga, somos muy escrupulosos y nos detenemos mucho a pesar de que tenemos el crono puesto. No creo que sea una responsabilidad mayor, pero sí tiene un trabajo extra que es el de hacer un análisis más detallado de lo que está ocurriendo. El volumen es mucho más grande y quizá es más complicado coordinarlo, pero para eso tenemos un equipo de edición donde yo juego una parte importante porque me dejan jugarla. La clave está en la manera de coordinarnos. Somos muchos y las decisiones hay que tomarlas muy rápido.
¿Cómo logra darle al informativo de las 20.00 su propia identidad para que la gente se enganche a él?
A las 20.00 la información está más completa, más analizada y con una serie de reacciones que van entrando durante el día. Y respecto a nosotras, cada una es hija de su madre y de su padre, en lo personal y en lo profesional. La suerte que tenemos es que aquí nos dejan ser. Yo bajo a los informativos habiendo escrito mis entradillas. No entiendo otra manera de comunicar. Puedo leer un cue, pero no voy a saber comunicarlo. A mis compañeras que me sustituyen les digo siempre que intenten escribirlas ellas mismas en la medida de lo posible.
La Sexta continúa apostando por unos informativos presentados solo por mujeres...
Sí, esa es una apuesta de la cadena desde el principio, cuando era muy difícil encontrar esa imagen en otras televisiones, y creo que ha marcado una referencia muy importante. Parte de esa lucha feminista que tuvo un punto de inflexión el pasado 8M tuvo un reflejo anterior en esta decisión que tomó La Sexta.
Empezó en la televisión nacional en la prensa del corazón (Ahora, Antena 3). ¿Volvería a hacerlo?
No, nada. Yo creo que lo he contado ya muchas veces, pero cuando surgió aquella oportunidad, yo tenía 25 años y llegué a Madrid desde Galicia, donde trabajaba en los informativos de la TVG. Se me llamó para hacer un magacín que nada tenía que ver con lo que después se convirtió. Entonces viví el peor capítulo de mi vida personal. Yo desconocía el mundo de las audiencias y el programa, que al principio se parecía más al estilo de Más vale tarde, no funcionaba tal y como estaba planteado. La dirección de la cadena decidió darle otro rumbo en el que yo no me sentía cómoda y así lo hice saber. Con todo mi respeto del mundo, ya no a la prensa del corazón, sino a mis compañeros de entonces.
No me sentía cómoda y pasó lo más duro de mi vida, que fue la muerte de mi padre. No tenía ni fuerza, ni ganas, ni encontré a qué agarrarme para salir de donde estaba. Nunca estuve cómoda presentándolo porque no podía ser yo. Trataba de contar, con el mayor de los respetos, el trabajo de mis compañeros que sí lo disfrutaban. Cuando Ferreras me dio la oportunidad de volver a los informativos, yo vi el cielo abierto porque es donde siempre quise estar. Así que no lo hecho de menos y no querría volver a hacerlo.
¿Cómo es Ferreras como jefe?
Antonio es un tipo muy apasionado y es sumamente cercano. Evidentemente, tiene la distancia de un jefe, pero no es una distancia que no puedas recorrer. Antonio abre siempre las puertas y a mí me ha ayudado muchísimo personal y profesionalmente. Es una persona a la que yo le voy a estar eternamente agradecida. Me dio la oportunidad y además es un maestro. Es un lujo estar al lado de un tipo que sabe tanto de esto y que lo vive con tanta pasión y aprender de él. Y en lo humano, no es un jefe.
La Sexta ha reivindicado siempre su vocación de servicio público en detrimento de TVE. ¿Teme que su cadena pierda ese espacio con los cambios que se han producido en la pública?
Nosotros sabemos qué es lo que estamos haciendo y cómo lo estamos haciendo. Evidentemente, hay que seguir evolucionando. Mola un montón tener a compañeros en frente en otras cadenas que te ayuden también a no quedarte atrás y a no estancarte por el hecho de que seamos el referente informativo. Y, por cierto, me pareció una pérdida importantísima la de Las Mañanas de Cuatro. Cualquiera podría decir que nos tenemos que alegrar por ir 'solos', pero cuando supimos que desaparecían nos dio mucha pena. Me parece un desastre que se quite un programa informativo como ese. Así que yo creo que no hay miedo, sino todo lo contrario. Nos alimentamos los unos de los otros y esto nos hace ser mejores.
Y personalmente, ¿cómo valoras los cambios que han ido produciendo en RTVE?
Yo creo que le espera un buen camino, que le hacía mucha falta. Yo creo que aunque es pronto, ya se está empezando a notar. Los movimientos que se han hecho a mí me gustan y creo que TVE tiene un gran camino que se merece por delante.