Diego Losada entró por primera vez en la redacción de TVE hace 12 años como "grumete" del Telediario del fin de semana. Ahora, el periodista lo presenta con Lara Siscar, que fue la primera presentadora con la que coincidió en un paltó hace nueve temporadas, en el Canal 24 Horas. "Se cierra el círculo".
En estos años, Losada ha pasado por otros formatos, como España Directo, La Noche en 24 Horas, La mañana de La 1 o los informativos de Telemadrid. Toda esa experiencia le ha hecho crecer como profesional y también ganar en naturalidad ante las cámaras.
"Los espectadores nos tienen que ver como personas normales que les hablan de tú a tú, sin engolar, sin impostar", cuenta a ECOTEUVE.ES. Esa forma de ser, sin corsés, también le ha servido en las entrevistas más difíciles que ha conducido en el Canal 24 Horas. "Se consigue mucho más con la sonrisa que cerrando mucho las cejas", afirma Losada sobre sus charlas con los políticos más duros.
La naturalidad también alcanza otras facetas de su vida. Antes, por ejemplo, "ocultaba" su gran hobby, la banda de rock en la que toca con unos amigos. "Tenía miedo a que alguien pensara que eso no es serio para un presentador del Telediario. Pero somos personas... ¿y por qué no? ¿Eso me va a hacer peor periodista? ¿Va a minar mi credibilidad? No lo creo. El trabajo sigue siendo igual", explica. "Y tampoco lideramos las listas del Billboard", bromea.
Acaba de estrenarse en el Telediario del fin de semana. ¿Cómo asume este nuevo reto en TVE?
Para mí se cierra un círculo, porque hace 12 años entré en RTVE como redactor del Telediario del fin de semana, como grumete, y ahora es un honor compartir el timón de este gran barco con Lara Siscar.
Sabe, entonces, lo que es trabajar en fin de semana...
Ahora siento que en el fin de semana hay muchos yoes de hace 12 años porque hay un equipo que conjuga juventud e ilusión con veteranía. Y ese es el ADN que lleva TVE. En aquellos años me desarrollé como redactor y reportero en la calle. Y ahora la intención es no perder eso, que los presentadores no sólo nos quedemos en plató, sino que ganemos en cercanía. A Lara y a mí nos gustará estar en la calle para hacer reportajes y dar otra mirada sobre los temas que afectan a los ciudadanos.
¿Qué tal llevará trabajar en fin de semana?
Recordaré aquellos primeros tres años como reportero. Y utilizaremos el resto de los días como una ventaja competitiva porque tenemos intención de reportajear. Tendremos de lunes a viernes disponibles para rodar con más tiempo y hacer reportajes más elaborados para los fines de semana.
¿Y a nivel personal?
Seguiré con Durden, mi banda de rock como hobby, y también continuaré haciendo deporte.
No es habitual que el presentador de un informativo sea rockero...
Cuando presenté el Telediario Matinal durante tres años era una faceta que ocultaba por miedo al qué dirán y a que alguien pensara que eso no es serio para un presentador del Telediario. Pero somos personas... ¿y por qué no? Si yo tengo una afición y a veces damos algún concierto y lo pasamos bien. ¿Eso me va a hacer peor periodista? ¿Va a minar mi credibilidad? No lo creo. El trabajo sigue siendo igual. Tampoco lideramos las listas del Billboard (risas). Es un registro más y a nadie le debería asustar ni es criticable.
¿En qué se diferencia un Telediario del fin de semana a los informativos de los días laborables?
El Telediario del fin de semana es el que más se ve en familia y genera debates en casa. Y eso es porque hemos elegido bien los temas que preocupan a los diferentes miembros de esa familia.
Dicen que los jóvenes ya no tienen apego a la televisión. ¿Se imagina a un adolescente viendo el Telediario con su padre?
Me interesa mucho el debate sobre la brecha generacional. No está todo perdido en ese asunto. El vínculo familiar continúa y, por lo tanto, la televisión sí puede ser ese medio que una, sin que eso signifique que le hagamos la competencia a Tik Tok o las redes sociales.
¿Cómo se puede recuperar al público joven sin perder el rigor?
Lo que está de moda es la naturalidad. Los chavales están viendo en Twitch a personas que les hablan a los ojos y casi sin maquillaje, sin grandes aspavientos, como a veces pecamos en televisión. Eso nos da pistas de que la era de lo artificial ha terminado. A todos los que salgamos en la tele nos tienen que ver como a personas normales que también les hablan de tú a tú, sin engolar, sin impostar. Y esa es mi intención.
¿Qué tal encaja con Lara Siscar?
Hace 9 años empecé a presentar en el Canal 24 horas con ella. También es un placer cerrar ese círculo. Aprendí mucho, aunque creo que somos distintos en el estilo, no hay que ocultarlo, pero creo que eso va a complementar nuestro trabajo. El hecho de que seamos dos, refuerza la idea de que estamos ante un Telediario familiar, con dos personas que se llevan bien. No tengo miedo a sonreír en el Telediario porque la gente lo hace. Nos tienen que ver cercanos.
Su trabajo en 'La noche en 24 horas' le hizo vivir alguna situación convulsa. ¿Teme que al saltar a La 1 la tensión vaya en aumento con más presión desde determinados partidos políticos?
El Telediario es bien distinto a un formato de análisis político, donde sí ha habido alguna entrevista que ha alcanzado una dimensión mediática, pero es una anécdota. Ocurrieron ciertas cosas que quizá hoy volvería a hacer, porque si hacen una alusión directa a nuestro trabajo, creo que tenemos la obligación de poner los puntos sobre las íes.
En cualquier caso, quiero dejar claro que en mi faceta como entrevistador se consigue mucho más con la sonrisa que cerrando mucho las cejas. Si decimos que RTVE es la televisión de todos, porque lo es, tenemos que asumir y resignarnos a que nos critiquen todos. Creo que es positivo recibir críticas siempre y cuando sean constructivas, así que no las temo.
¿Cómo gestionas que media España se ponga en tu contra y, al día siguiente, ya no se acuerde porque está en tu contra la otra media?
No creo que media España se pusiera en contra. Es cierto que cuando haces bien tu trabajo, se generan críticas. Si repreguntas sobre algo que es medio verdad, o algo que es injusto, quizá esa persona se sienta molesta, pero estamos haciendo nuestro trabajo. En La Noche en 24h tuve que entrevistar a todos los partidos políticos y recibí críticas de partidos contrarios.
Compite con Matías Prats y Mónica Carrillo. ¿Es un acicate o asusta?
Y Pepe Ribagorda, Ángeles Blanco, los compañeros de Cuatro al Día... Son profesionales con los que he crecido. El fin de semana es muy competitivo pero también sabemos cómo podemos ganarnos el favor del público para que nos tomen como referencia en ese Telediario familiar.