Carlos Herrera ha abierto la semana en COPE hablando de la erupción volcánica en La Palma, pero también ha puesto el foco en la manifestación neonazi de Chueca este sábado, en la que decenas de personas exhibieron pancartas de ultraderecha. Durante la marcha, lanzaron gritos y cánticos homófobos como "fuera maricas de nuestros barrios" y "fuera sidosis de los barrios de Madrid".
El periodista calificó lo ocurrido como "el esperpento del fin de semana" remarcando que fue una "manifestación autorizada". "Era una asociación vecinal para protestar contra la Agenda 2030, que a la hora de la verdad, se pasearon por el barrio de Chueca y Malasaña diciendo barbaridades y salvajadas contra el colectivo homosexual", aseguró en primer lugar.
Sin embargo, Herrera cree que la marcha, investigada por la Fiscalía por posible delito de odio, pudo ser orquestada. "Yo, como otros, tengo serias dudas de la naturaleza real de esa manifestación nazi, pero nazi, nazi, nazi. Nazi del brazo estirado", dijo el periodista. "Vamos a creer que eran nazis de verdad y no un atrezzo del enésimo bulo que alimenta el PSOE y Podemos para compensar el descrédito de episodios como el de Mondragón [el homenajes a Parot] y estigmatizar a sus rivales del centro derecha".
Las dudas de Herrera con la manifestación nazi de Chueca
"Como cuando hace casi tres años Juanma Moreno se proclamó presidente de Andalucía Pablo Iglesias activó la primera alerta antifascista y el PSOE fletó autobuses", recordó la voz de las mañanas de la emisora de los obispos.
"Qué curioso que ese día de la manifestación de esos tíos no hubiera nadie de la gente antifascista como le hicieron a los que se manifestaron en Mondragón a favor de las víctimas. El odio del país vasco sí está institucionalizado, porque tiene el respaldo de partidos y de una parte de la sociedad y acción u omisión de las instituciones del Gobierno vascas y españolas", remató Herrera.