Juan Luis Cebrián se ha embolsado 1,87 millones de euros en 2014, el mismo año que Prisa, el grupo que preside, ha cerrado con unas pérdidas de 2.236 millones de euros por la venta de Canal +, entre otras cosas, mientras los ingresos y los resultados operativos acumulan caídas de hasta doble dígito.
El sueldo del primer espada del grupo audiovisual incluye un pago fijo en metálico de un millón de euros, un variable de 810.000 euros, también en metálico por haber ejecutado la venta de las acciones de Mediaset por unos 483 millones y haber reducido deuda con esos ingresos, y unos 68.000 euros por otros conceptos.
En esta línea, dentro de los emolumentos de Cebrián se incluye el pago de "48.000 euros en concepto de alquiler de vivienda" a la que se comprometió Prisa en 2013 al fijar el "lugar habitual de trabajo" del presidente del grupo en Madrid. Además de los 1,8 millones correspondientes de 2014, Cebrián ya tiene aprobado el cobro de un bonus de un millón de euros en acciones en 2016 y tiene reservados seis millones de euros en concepto de complemento de jubilación. El primer espada de la dueña de El País, que ha llevado a cabo despidos en La Ser y va a acometer ajustes en su división de revistas, cobrará esos seis millones cuando se retire en 2018 o antes si es despedido o decide restringir el contrato. Los 1,8 millones de euros en metálico superan a los 1,5 millones cobrados en 2013 aunque, si se incluyen las acciones de ese año, ha cobrado unos 227.000 euros menos.
En conjunto, el consejo de administración de Prisa se ha repartido 7,31 millones de euros, 1,4 millones de euros menos que hace un año. Eso se debe a que en 2014 se han sumado dos nuevos consejero: José Luis Sainz Díaz, nuevo consejero delegado, y Roberto Alcántara Rojas que suscribió una ampliación de capital de 100 millones. A su vez, Fernando Abril-Martorell, que deja su cargo de consejero delegado en el grupo, se lleva 2,2 millones de euros, incluyen una compensación por no competencia.