Basta con escucharle hablar unos minutos para entender el fulgurante ascenso que ha vivido en los últimos años Álvaro Benito dentro de Movistar+. El polifacético exfutbolista se ha destapado como un gran comunicador, y su elegante y sencilla forma de leer y transmitir lo que pasa en cada partido ha hecho que la plataforma de pago haya apostado por él para completar su 'tridente' titular de comentaristas junto a Carlos Martínez y Maldini.
Eso sí, hay una cosa que el salmantino quiere dejar clara: "No me considero sustituto de Michael Robinson porque su figura es irremplazable", declara a ECOTEUVE.ES a la hora de valorar los motivos por los que ha sido el elegido para ocupar el puesto que, lamentablemente, el británico dejó vacante tras su fallecimiento el pasado mes de abril. "Michael inventó junto con Carlos [Martínez], Julio [Maldini], y muchos otros, una manera de contar el fútbol que creo que nos ha influenciado a todos", reconoce.
Consciente del gran "privilegio" que tiene entre manos, Benito no olvida cómo ha llegado hasta este dulce momento profesional que al fin le ha tocado vivir. En 1996, una gravísima lesión en la rodilla izquierda interrumpió su carrera como futbolista cuando se había convertido ya en una de las grandes promesas del Real Madrid. Tras varias operaciones, y varios intentos de volver a los terrenos de juego, Benito acabó anunciando su retirada definitiva del fútbol.
Años más tarde, el joven dio el salto a la música y fundó el grupo Pignoise, con el que triunfó en España durante varios años. Hasta que una llamada de teléfono lo volvió a cambiar todo y la vida de Álvaro volvió a dar un giro de 180 grados. "Josep Pedrerol fue la primera persona que me llamó para volver al fútbol. Siempre le digo que, gracias a él, me empecé a interesar otra vez por la que ha sido la pasión de mi vida", recuerda el comentarista.
"Insistió mucho al principio para que yo entrara en Punto Pelota y ahí me empezó a picar de nuevo el gusanillo. Me saqué los títulos de entrenador, ya me llamaron de la Cadena SER para entrar en Carrusel y comentar el Madrid... Ha sido todo poco a poco. He tenido la suerte de trabajar con Josep y es un auténtico monstruo y un fenómeno", confiesa.
Antes que nada, le hemos visto en televisión con el brazo lesionado. ¿Cómo se encuentra?
Bueno, bien... tengo una reciente cirugía en el dedo de la mano derecha, pero por lo demás todo bien. Tuve la rotura de un tendón flexor en el dedo y ha requerido de cirugía. Ha sido una operación complicada y, por lo que me han dicho, también será una recuperación relativamente complicada. Estamos en el proceso.
Ha debutado ya como comentarista en La Liga junto a Carlos Martínez y Maldini. ¿Cómo se ha sentido?
La verdad es que bien, mientras sea comentar fútbol, es mi hábitat natural. Estoy muy cómodo con ellos. La relación que tenemos es muy buena y la verdad es que da gusto poder trabajar con profesionales así. Te lo ponen muy fácil.
Tras la pérdida de Michael Robinson, ¿por qué cree que Movistar le eligió a usted para completar ese 'tridente' de comentaristas?
Antes que nada, quiero destacar que Michael es insustituible. Una figura como la de Michael, con todo lo que representa para tantas y tantas generaciones, entre las cuales me incluyo, es insustituible. Él se inventó junto con Carlos [Martínez], Julio [Maldini], y muchos otros, una manera de contar el fútbol que creo que nos ha influenciado a todos los que hemos crecido con ellos. Así que yo no me considero sustituto porque Michael es irremplazable.
Yo lo que intentaré es aportar lo que pueda aportar. Yo, desde que comento el fútbol, intento acercar los entresijos del juego al aficionado. Yo intento trasladar lo que está pasando a nivel táctico sobre el campo y que cualquier espectador lo pueda entender. Cada vez, el aficionado al fútbol, en especial las nuevas generaciones, van demandando conocer más por qué pasan las cosas en el campo. Se han quedado atrás los tópicos de que cuando pierdes "hay que echarle más cojones" y de que cuando ganas "eres un fenómeno". La gente quiere saber por qué a su equipo le está costando más hacer ciertas cosas y creo que eso es lo que humildemente intento: acercar el juego al aficionado.
¿Con qué mensaje se queda de todo el legado de Michael Robinson?
Con muchísimos. Sobre todo, el positivismo con el que encaraba la vida, siempre con una sonrisa en la boca. Ahora que paso mucho tiempo con Carlos [Martínez], me cuenta muchas anécdotas que han vivido. Fue una persona muy vitalista, hasta en los momentos en los que la enfermedad parecía que ganaba la batalla. Yo creo que así se debe vivir la vida. A veces, pensamos que esto no se va a acabar nunca y en cualquier momento te das cuenta de que estamos aquí de paso. El tiempo pasa cada vez más rápido y hay que disfrutar. Yo me considero un privilegiado por poder vivir lo que vivo y de poder vivir de contar el fútbol. Me encanta lo que hago, así que me quedo con eso: la felicidad con la que encaraba la vida.
¿Qué es lo que más admira de Maldini y de Carlos Martínez?
Hacer lo que hace Carlos, yo sería incapaz de hacerlo: esa facilidad para narrar, con ese énfasis, y de dar siempre en la tecla adecuada, a pesar de tener tantas cosas en la cabeza. A mí narrar me parece dificilísimo. Nosotros vamos apuntando cosas sobre lo que va pasando, pero él lleva todo el peso y me parece muy complejo. Carlos se ha inventado una manera de narrar el fútbol y creo que las nuevas generaciones de narradores le han tenido a él de referencia. Casi nada.
Y de Julio qué voy a decir. Me ha contado que fue el primero en este país que empezó a compartir partidos grabados en VHS con periodistas de otros países, que también le enviaban otros a él. Luego se puso no sé cuántas parabólicas en su casa para ver las ligas de otros países. El tío es un pionero. Los dos son personas muy humildes, a pesar de llevar toda la vida en esto y de ser los números uno. A mí me han recibido con los brazos abierto y eso es de elogiar.

Se ha destapado como un gran comunicador. ¿Era algo vocacional o lo ha ido descubriendo con el paso del tiempo?
Mi vocación era jugar al fútbol. (Risas). Esa era la verdadera vocación de mi vida. Pero yo creo que esto es un camino que empecé a recorrer paralelamente cuando comencé a entrenar y es un proceso. Cada vez, entiendo que vas mejorando y yo intento aprender de quien tengo al lado. He tenido la suerte estos años de compartir trabajo con algunos de los mejores profesionales de este país en el mundo de la comunicación.
Yo siempre intento observar y absorber para cada vez ser mejor. Yo acepto los consejos de todo el mundo y soy muy exigente con lo que hago. Intento prepararme muy bien cada partido, porque siento que es una responsabilidad contar el fútbol para millones de personas. Además, trato de hacerlo con respeto, porque también son personas, con familiares y sentimientos, las que están en el terreno de juego, y clubes en los que hay muchos sentimientos detrás. Hay que ser muy respetuoso y prepararse muy bien lo que vas a contar. Creo que es una responsabilidad tremenda la posición en la que estoy e intento prepararme lo mejor posible.
¿De qué forma se prepara antes de un partido?
Yo me veo cada semana todos los partidos de liga, incluso los que no he podido ver, porque estaba viajando, también me los pongo cuando puedo. Entonces, me apunto las cosas más importantes en lo que a los sistemas de juego y futbolistas se refiere. Además, siempre me preparo un informe muy detallado de todo antes de cada partido: estadísticas de jugadores y datos que son importantes y que creo que me pueden ayudar. Creo que mi mayor fortaleza es ver el fútbol a tiempo real, pero es bueno siempre tener un apoyo detrás de todo lo que ha sucedido, porque te puede ayudar en ciertos momentos de la retransmisión.
¿Qué aprendió de su etapa en El Chiringuito? ¿Qué recuerdos guarda?
¡Muy buenos! Josep Pedrerol fue la primera persona que me llamó para volver al fútbol. Siempre le digo que, gracias a él, me empecé a interesar otra vez por la que ha sido la pasión de mi vida. En aquellos momentos, yo estaba completamente focalizado en la música y no tenía en la cabeza regresar al mundo del fútbol. Insistió mucho al principio para que yo entrara en Punto Pelota y ahí me empezó a picar de nuevo el gusanillo. Me saqué los títulos de entrenador, ya me llamaron de la Cadena SER para entrar en Carrusel y comentar el Madrid... Ha sido todo poco a poco.
He tenido la suerte de trabajar con Josep y es un auténtico monstruo y un fenómeno. Después he tenido la suerte también de trabajar con Jesús Gallego, Manu Carreño, ahora con Carlos Martínez, Juanma Castaño, Maldini, Jorge Valdano, Dani Garrido... Cuando tienes la suerte de estar al lado de los mejores, si eres una persona inteligente, a partir de la observación intentas mejorar en tu trabajo.
El formato de El Chiringuito es muy distinto a los de Movistar+. ¿Es más fácil, o más difícil, trabajar desde la imparcialidad que ahora muestras en la plataforma?
Ni más fácil, ni más difícil. Creo que mi fortaleza está más en hablar del juego, sinceramente. Aún así, cuando iba a El Chiringuito, que tiene otro tono y que conceptualmente es diferente, yo intentaba también focalizarme en el juego y en lo que pasa dentro del terreno de juego. A mí lo que pasa fuera me interesa menos. Aquí, en Movistar, lo que me piden únicamente es que hable de lo que pasa dentro y creo que es donde yo me siento más cómodo. Creo que es donde yo valgo y donde me pueden utilizar mejor.
Su carrera como comentarista ahora mismo es muy prometedora. Hoy por hoy, ¿descarta volver a entrenar o le gustaría hacerlo de nuevo en el futuro?
Depende. La vida nunca sabes por donde te va a llevar. Mi vida así me lo ha enseñado. Ahora yo estoy muy cómodo, tengo un trabajo que me encanta y en todos los aspectos estoy feliz. Para yo renunciar a esto tendría que ser algo irrechazable. Tendría que ser algo que llegase y dijese: 'Es que me tengo que ir a entrenar, porque es una oferta irrechazable'. No es fácil que llegue algo así, pero en esta vida nunca se sabe.
Se habla mucho de que Barça y Madrid han perdido fuelle. ¿Ve de verdad La Liga más igualada? ¿Ve a Atlético o Sevilla con posibilidades de dar la campanada?
Es un poco pronto para hacer valoraciones, pero creo que los equipos están encontrando su sitio. En teoría, el Real Madrid, si sigue los pasos de la temporada pasada, va a ser un candidato bastante fiable. Todo ello, si sigue los pasos de solidez defensiva del curso pasado, porque al final, eso te aporta regularidad. El Barça, de momento, es un melón por abrir. Hay algunos cambios, al final no tantos como se podía pensar, pero hay algunos cambios. Creo que entre esos dos va a estar, aunque estaría bien que el Atlético de Madrid pudiera estar cerca. Sería bueno para La Liga. Veo también al Sevilla con potencial para ser bastante regular y, en teoría, por plantilla y por objetivos, el Villarreal debería pelear también por esa cuarta plaza. A partir de ahí, creo que hay un escalón donde vienen algunos por detrás, pero esos cinco equipos creo que deberían estar ahí arriba. El título, entre Madrid, Barça y Atlético.
¿Crees que la situación de Messi es reversible?
No sabría decirte. Esto es una cosa que sólo podemos interpretarla desde fuera. No tengo ni idea. El fútbol, como todo, es un estado de ánimo. Messi, después de todo lo que pasó, no estaba feliz en el campo y esa fue una de las razones, de las muchas gotas que fueron llenando el vaso, que hicieron que tras el resultado contra el Bayern terminara por tomar esa decisión de comunicar que quería marcharse.
Pero si este año vuelve a ser feliz jugando al fútbol, ¿por qué no? ¿Por qué no se va a quedar? El fútbol cambia mucho y muy rápido. Si el equipo funciona este año y el se siente cómodo con el entrenador y los compañeros, ¿dónde va a estar mejor que en Barcelona, que lleva toda la vida allí? Y si este año el Barça no tiene una buena temporada de nuevo, a lo mejor le apetece cambiar de aires, ya que, por la edad que tiene, tampoco le quedan tantos años de fútbol. Es una decisión personal absolutamente respetable, haga lo que haga.
Por cierto, vuelven Los hombres de paco. ¿Qué le pareció la noticia?
Pues me hizo muy feliz. Nos ha traído muchos recuerdos. En ese momento, nos cambió la vida a nivel musical para el grupo. Pudimos empezar a vivir de la música y fue una etapa que disfrutamos mucho durante muchos años. Estamos encantados y deseando que empiece ya la serie.
¿Va a estar presente de alguna manera, ya sea recuperando su papel de Jimmy o participando en la sintonía de la cabecera?
En la serie no voy a estar. En cuanto a la música, estamos en conversaciones y todavía no podemos decir ni que sí, ni que no, ni que todo lo contrario.